Con la participación de 20 ministros laborales, los ministros adjuntos y embajadores de los Estados miembros de la Organización de los Estados de los Estados Unidos (OEA) comenzaron la vigésima segunda conferencia interamericana de los jefes de la cartera laboral en Colombia. La Ministra de Trabajo, Gloria Ines Ramírez, encabezó el evento del evento, cuyo tema central es «el futuro del trabajo en Estados Unidos: ensayo de paz, justicia social y acciones climáticas».
La conferencia tiene la presencia de líderes líderes como Nérstor Méndez, Secretario Adjunto de OAS, y Gilbert F. Houngbo, CEO de II. Esta reunión ministerial es una oportunidad clave para discutir las decisiones laborales en el hemisferio y establecer un consenso sobre prioridades y acciones regionales que se relacionan con la paz, la justicia social y el clima.
Ramírez enfatizó la importancia de la conferencia sobre la formulación de la agenda regional, enfatizando la necesidad de discutir la tecnología y la relación entre la capacitación, la educación y el trabajo. También enfatizó la importancia de abordar la inteligencia artificial desde un punto de vista ético, asegurando que las máquinas complementen y no reemplacen a la humanidad.
Durante el evento, se considerarán preguntas como el trabajo, la transformación productiva, la migración laboral y la transformación a la energía limpia. Ramírez concluyó que los cambios acelerados en el entorno de trabajo son desafíos y oportunidades de trabajadores.
Por otro lado, Nérstor Méndez enfatizó la necesidad de ministros para el diálogo para el progreso en los compromisos establecidos en la declaración de Bogotá y el plan de acción. Este plan incluye prioridades como la participación del trabajo y la regulación de las tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial.
El Secretario de la OEA -General agregó que la conferencia no solo se centrará en los problemas laborales tradicionales, sino que también integrará cuestiones decisivas como la justicia social y las acciones climáticas. Esto asegurará que las políticas laborales futuras satisfagan las necesidades económicas y los cambios sociales y ambientales en la región.
